Calçotada tradicional del Club, Alcover i Guimerà

De buena mañana, salida en autocar desde los diferentes puntos de recogida habituales en dirección hacia Alcover. Con historia medieval, renacentista y modernista, podremos encontrar entre sus murallas lugares históricos que fueron importantes desde el siglo XIII. Esta mañana, haremos un paseo con guía que nos explicará in situ qué define la identidad de la villa a partir de su pasado, además de descubrir el casco antiguo de Alcover, lleno de secretos y leyendas.

A continuación os proponemos disfrutar de una simpática y deliciosa calçotada acompañada de una buena parrillada de carne en el Restaurante Esportell del Bou en Solivella. Tal y como hemos comentado en otras ocasiones, parece que el origen de esta tradición tiene fecha de nacimiento y autor. El dicho nos explica que todo se inició a finales del siglo XIX, cuando un campesino, Chat de Benaiges encontró dos cebollas blancas que habían germinado en su huerto. El protagonista las recogió, cortó las raíces y las coció con llama. A continuación, después de quitarles la piel ennegrecida, las sucedió en una especie de salsa formulada a partir de aceite, vinagre y sal y el resultado que obtuvo fue tan satisfactorio, exquisito y placentero que perduró año tras año convirtiéndose, hoy en día, en todo un fenómeno gastronómico único en el mundo.

Después de comer haremos una última visita para conocer el pequeño municipio de Guimerà, en la comarca de L’Urgell. Aquí haremos una visita guiada por el núcleo medieval, haciendo un paseo histórico por los arcos, las galerías y las calles empedradas de la villa. Cabe decir que, Guimerà es para muchos uno de los pueblos medievales más bonitos de Cataluña, con un decorado que parece congelado en el tiempo y muchos secretos por descubrir entre sus calles. La visita nos permitirá profundizar en el conocimiento de su singular organización urbanística y arquitectónica, de sus monumentos y patrimonio, además de las tradiciones locales y nos perderemos caminando por la plaza Mayor y por sus calles laberínticas y costeranzas.

Al acabar y después de un día lleno de emociones será hora de despedirnos y regresar a los mismos puntos de recogida de la mañana.